“Es menos de lo
que pensábamos. El tobillo está un poco hinchado, pero no ha sido nada
grave. Las sensaciones son buenas y todo va a quedar en un susto.
Esperaremos la evolución”.
“En un principio no sabía muy bien si me había pisado él, si había pisado mal yo… Lo cierto es que se me fue el tobillo, sentí dolor y nada más. No noté ningún chasquido. Dentro de lo que me dolía, intentaba pensar que no fuera mucho”.
“Me había mucha ilusión porque es en mi casa. Era ante mis amigos, ante mi familia, pero el fútbol es así. Nunca había jugado ni en el campo anterior ni en el campo nuevo. Tenía la esperanza de enfrentarme al equipo de toda mi vida, al que me dio la oportunidad de jugar en el fútbol profesional. Estoy desilusionado por eso, pero lo importante es que la lesión quedó en un susto porque podía haber sido peor”.
“El Fuenlabrada me dio la oportunidad de dar el salto a Segunda División. Soy de allí, tengo muchos amigos, pero debemos mirar lo bueno”.
“Es un buen equipo y ahora cuenta con gente de Madrid, con jugadores que han regresado a su casa y que tienen la posibilidad de seguir disfrutando del fútbol en su ciudad natal. Es un rival que ha encajado pocos goles, que tampoco hace muchos, pero que será difícil ganarle. Va a ser un partido complicado”.
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