El CD Tenerife y UD Las Palmas vieron satisfechas ayer una de sus principales reivindicaciones ante el Gobierno de Canarias. El encuentro de los máximos mandatarios de ambos clubes, Miguel Concepción y Miguel Ángel Ramírez, con el principal dirigente del Ejecutivo regional, Paulino Rivero, trajo consigo el compromiso de que cobrarán todas las cantidades que se les adeudan desde la temporada pasada. En total, unos 600.000 euros a cada club, cantidad que les será abonada en las próximas semanas.
Concepción y Ramírez salieron muy satisfechos de la reunión, que contó también con la asistencia del director general de Deportes del Gobierno, Ramón Miranda. "Cada parte ha fijado su posición. Sabemos las dificultades actuales y estamos dispuestos a estudiar qué soluciones nos dan. Los contratos están firmados y tenemos comprometidos esos ingresos, así que sería muy dificultoso que no se cumplieran", apuntó Concepción, quien reveló que el Ejecutivo "esperará a los presupuestos del Estado" para tomar una resolución definitiva a este respecto.
"Hemos expuesto lo que supondría para ambos clubes una rebaja de esas cantidades", continuó Concepción. Ramírez, por su parte, explicitó su complacencia ante la postura más transigente de Rivero, quien inicialmente había planteado que los recortes eran inamovibles. "Apelábamos a la comprensión del presidente del Gobierno de Canarias. Estamos de acuerdo en que la sanidad, la educación y los servicios sociales son prioridades, pero velamos por los intereses de las entidades deportivas y de los aficionados, y queremos que se cumplan los compromisos acordados", declaró ante la prensa el dirigente amarillo. "Teníamos pendiente una factura de 600.000 euros y el presidente del Gobierno se ha comprometido al pago en las próximas semanas. Él es consciente de que hay un contrato y debe cumplirse", anotó.
Ramírez se mostró tajante a la hora de declarar que no podían permitir "una reducción del contrato actual del 68 por ciento de las cantidades, pues eso está fuera de toda lógica". "Entendemos que hay que buscar una solución. Hay cambios, porque las cosas están cambiando, y a pesar de que hay un contrato firmado a vencimiento en 2015, la situación está empeorando y somos conscientes de ello. Queremos una negociación, no una imposición", concluyó.
Tanto Ramírez como Concepción entienden que "hay que buscar un punto de equilibrio y que cedan todas las partes". Y entre ellas, el Gobierno. En su nombre no tomó la palabra su máximo exponente, Paulino Rivero, pero sí el nuevo responsable del área de Deportes. "Esto es una prueba de que estamos dispuestos a escuchar", comentó Ramón Miranda. "Este jueves se ha dado un paso importante para que se dé la solución más beneficiosa para todas las partes", opinó. Asimismo, recalcó que harán todo lo posible "por asumir las cantidades pendientes de la temporada 2010/11 lo antes posible". "Ahora toca renegociar y estoy seguro de que habrá un buen final porque existe gran predisposición de las partes", celebró.
A lo largo de la reunión, el presidente de la UD llegó a recordar, a modo de anécdota, que han tenido que aplazar un pago pendiente del IGIC donde se contemplaba el 5 por ciento correspondiente a esos 600.000 euros que el Gobierno no les ha satisfecho del contrato de patrocinio rubricado con la consejería de Turismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario