Llegó hace dos meses sin levantar pasiones, con su larga trayectoria
ligada al fútbol como tarjeta de presentación y los años vividos en
Tenerife como especial nexo de unión con el proyecto que iba a liderar.
Con el paso de las semanas, a golpe de ruedas de prensa y entrevistas,
Álvaro Cervera se ha ido dejando conocer. Pero son sus futbolistas los
que verdaderamente se han encargado de descubrir el perfil humano y
también profesional del que es su nuevo jefe.
Todos los que hablan sobre él, coinciden en dar las mejores
referencias. El ejemplo está en dos de los capitanes de la plantilla,
Sergio Aragoneses y Chechu Flores.
El portero tiene muy en cuenta que Álvaro fue futbolista y que, por
ello, "sabe cómo manejar un vestuario". Pero esto no es todo. Aragoneses
asegura que los entrenamientos nunca son aburridos. "Lo bueno es que
vienes a entrenar y trabajas duro, pero también te diviertes, y eso es
algo que hace las cosas mucho más llevaderas", sostiene un jugador para
el que es crucial "la sintonía" entre los futbolistas y los técnicos.
"Es lo mejor que puede haber", asevera.
Sergio remarca igualmente la "cercanía" de Cervera con sus pupilos.
"Tiene las cosas muy claras y me gusta cómo las dice y también lo que
piensa", apunta. "Si le das esfuerzo, se siente satisfecho", añade sobre
el entrenador.
Su compañero Chechu Flores afirma que si el Tenerife está dando la
impresión, en el comienzo de la Liga, de haber asimilado el estilo de
juego que quiere Álvaro es precisamente gracias al técnico. "El míster
está consiguiendo que en el equipo tengamos sensaciones que la temporada
pasada no tuvimos", expone comparando el arranque de este curso con el
agitado ejercicio anterior. Según el interior jienense, Cervera tiene
"las ideas muy claras y va con ellas a muerte; no cambia su manera de
jugar y lo único que le interesa es su equipo. No piensa tanto en los
rivales y eso se nota mucho luego en el campo", agrega dando a entender
que al Tenerife de la campaña 2011/12 le costó encontrar la identidad
que Álvaro sí ha logrado darle al equipo en tan poco tiempo.
El centrocampista, que está convencido de que "es más fácil sumar los
tres puntos jugando bien", no duda de que "el año pasado no tuvimos
esta apuesta que está teniendo el míster, y eso es algo que la gente no
valora tanto pero que es importante para un grupo".
Los de Sergio y Chechu son dos testimonios que ponen de relieve lo
bien que ha encajado Álvaro en el Tenerife. Lo indican incluso los
últimos en sumarse a la plantilla, como Víctor Bravo, quien, con apenas
un par de sesiones realizadas tras su regreso al club, reveló que se
llevó una grata impresión del entrenador. "No lo conocía personalmente y
me ha sorprendido gratamente. Es un tío al que le gusta hablar. Cuando
hay algún momento para el cachondeo, también deja sus bromas. Y los
entrenamientos son dinámicos, siempre con balón", comentó Bravo.
Cervera sostiene que esta relación con los jugadores no nace de una
actitud forzada. "Aunque parezca que no, quiero a todos los jugadores
por igual y los trato de la misma manera", advierte el técnico, quien
también reconoce que quizás no le cae bien a todos. "Si hago alguna
desigualdad, más que por mi parte es por la suya, porque hay alguno más
retraído".
http://www.eldia.es/2012-09-06/jornada/9-equipo-volcado-entrenador.htm
http://www.eldia.es/2012-09-06/jornada/9-equipo-volcado-entrenador.htm
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