Castro Santos relevó a Mauro
Sandreani, después de que el italiano presentara su dimisión en la
séptima jornada. La llegada del técnico gallego aportó cordura al
representativo, todavía desorientado a raíz del reencuentro con la
categoría de plata, tras diez temporadas consecutivas en Primera. Cogió
al equipo decimoquinto y lo dejó octavo.
Santos comenzó su carrera como técnico en el Pontevedra, su tierra natal, y continuó en el Arenteiro antes de llegar al Compostela, al que ascendió de Tercera a Primera División. Tras su paso por Santiago, fichó por el Celta. Puso los cimientos para que el equipo vigués abandonara su condición de modesto. Irureta y Víctor Fernández continuarían con su trabajo hasta construir el mejor Celta de la historia.
Santos comenzó su carrera como técnico en el Pontevedra, su tierra natal, y continuó en el Arenteiro antes de llegar al Compostela, al que ascendió de Tercera a Primera División. Tras su paso por Santiago, fichó por el Celta. Puso los cimientos para que el equipo vigués abandonara su condición de modesto. Irureta y Víctor Fernández continuarían con su trabajo hasta construir el mejor Celta de la historia.

La siguiente estación de Castro Santos sería el fútbol portugués.
El gallego entrenó con éxito al Sporting de Braga, un humilde de la liga
lusa al que clasificó para la UEFA y para una final de Copa. A su
vuelta a España, dirigió al Sevilla antes de incorporarse al Tenerife.
Tras dejar la Isla, estuvo un tiempo inactivo hasta que fichó por el
Polideportivo Ejido, equipo al que dirigió además en la 07-08. También
trabajó para el Córdoba y el Vecindario.
Fuente: http://www.clubdeportivotenerife.es/pagina.asp?idp=100&ids=194
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